El Renault Austral es el nuevo SUV de la marca francesa con el que sustituirá al Kadjar, su camioneta compacta lanzada en 2015 que nunca pudo despegar en el mercado.
Al igual que el Kadjar, el nuevo Renault Austral se asienta sobre la base del Nissan Qashqai: la plataforma CMF-CD. Sin embargo, para no vivir a la sombra del modelo japonés como sí lo hizo el francés a reemplazar, la compañía ha dotado al reemplazante de una identidad propia tanto en diseño como en mecánica.
De esta forma, el Renault Austral se distancia del Kadjar (y del Qashqai) con una apariencia que reúne lo visto en los últimos vehículos de la firma del rombo.
Su frontal es indiscutiblemente Renault con esos ya característicos faros partidos en forma de “C” que se unen con una gran parrilla a través de una delgada línea que sucumbe en el logo tamaño XL ubicado al medio.
La parte baja está esculpida con líneas afiladas que dan forma a las entradas de aire tanto del centro para el radiador como a las de las esquinas para la aerodinámica. La cereza del pastel es una especie de “splitter” que le da un toque juvenil y deportivo.
A los costados tenemos una marcada protuberancia aerodinámica en la parte baja de las puertas que le dan una actitud más agresiva a la estética lateral.

Además, molduras negras en el contorno inferior sugieren un trato aventurero ligero, ya que el perfil de los neumáticos, asentados sobre unas llamativas llantas de cinco radios, no se aprecia lo suficientemente justo para superficies más difíciles. Su silueta nos recuerda un poco al Mégane E-Tech Electric.
La zaga se sintoniza con el concepto y el lenguaje de diseño con faros también en forma de “C”, un spoiler en la parte alta, marcadas líneas de expresión y un robusto parachoques.

El interior es muy tecnológico y digital. El cuadro de instrumentos se proyecta en una pantalla de 12.3 pulgadas, mientras que el sistema de infoentretenimiento lo hace desde una pantalla táctil de 12 pulgadas en disposición vertical. Ambos visores forman una “L” al unirse a través de un bloque en el salpicadero.
Encontramos, además, un head-up display de 9.3 pulgadas, un particular volante de una forma media ovalada cuadrada que se ve distinto a otros modelos, así como una singular consola central.
Ofrece servicios conectados a través de la app MyRenault y sistema de control por voz a través de Google. Asimismo, tiene una ranura para la tarjeta SIM de 4G.

Sus dimensiones son de 4.51 metros de largo, 1.83 metros de ancho, 1.62 metros de alto y 2.67 metros de distancia entre ejes.
Motores híbridos
Toda la gama de propulsión del nuevo Renault Austral está compuesto por bloques de gasolina aliados con motores eléctricos. Así, hay versiones microhíbridas y totalmente híbridas en las versiones Austral E-Tech.
Las presentaciones “mildhybrid” están dotadas de una unidad de potencia de 1.3 litros turbo de cuatro cilindros que se asocia a un motor eléctrico de 12 voltios que, de acuerdo con la variante, entrega 140 o 160 caballos. Se asocia a una transmisión manual de seis velocidades.
Por otro lado, las más caras y equipadas tienen un motor de 1.2 litros de tres cilindros que hacen sinergia con un motor eléctrico de 68 voltios. Juntos entregan una potencia combinada de 160 o 200 caballos y se unen a una caja automática de siete velocidades.

La capacidad de las baterías de las versiones E-Tech le permitiría circular en modo eléctrico hasta en un 80 % del tiempo. Su consumo homologado se registra en más de 80 kilómetros por galón (4.6 l/100 km).
Todas las presentaciones cuentan con el sistema Multi-Sense que ofrece hasta seis modos de manejo. Opcionalmente, está el sistema 4Control que deriva la dirección a las cuatro ruedas para una mayor agilidad y estabilidad.
Estas unidades lucirán una “e” de color dorado al final de la terminación “Austral” en la zaga; mientras que las unidades con acabado “Esprit Alpine”, un paquete parecido a lo que ofrece BMW con su línea M o Audi con el S Line, será de color azul.
¿Qué les parece el nuevo Renault Austral? ¿Con estas especificaciones, creen que le irá mejor que el Kadjar? Nosotros creemos que sí.
